Llámanos al:

Puno, 19 de marzo de 2025 – A un año de los trágicos sucesos ocurridos el 25 de marzo de 2024 en el Colegio Gamaliel Churata del distrito de Cabana, los niños y niñas afectados continúan sufriendo consecuencias graves para su salud. A pesar del tiempo transcurrido, hasta la fecha no se ha logrado impartir justicia y las víctimas siguen enfrentando secuelas devastadoras, como dolores abdominales intensos, frecuentes dolores de cabeza, hemorragias, desmayos y pérdida de visión.
Los familiares de los menores y la comunidad en general exigen celeridad en las investigaciones y la sanción a los responsables de este trágico incidente. La demora en las investigaciones han generado un clima de incertidumbre y desconfianza, lo que ha incrementado el dolor y sufrimiento de las víctimas y sus familias.
Las autoridades del Ministerio Público han asumido compromisos firmes para acelerar el curso de las investigaciones, asegurando que los responsables de estos hechos sean llevados ante la justicia de acuerdo con la ley. No obstante, la comunidad mantiene su postura de que se necesita una mayor dedicación y transparencia para garantizar que estos niños y niñas reciban la compensación y atención que merecen.
«Es inaceptable que, a un año de estos lamentables hechos, nuestros niños sigan padeciendo por la falta de justicia. Exigimos que se actúe con celeridad para que no quede impune el sufrimiento que han vivido y siguen viviendo,» comentó un representante de los padres afectados, visiblemente consternado por la situación.
Mientras tanto, la comunidad continúa luchando por el bienestar y la salud de los menores, quienes aún requieren atención médica especializada para tratar las secuelas físicas y emocionales provocadas por este incidente.
El caso sigue siendo un recordatorio de la importancia de que las autoridades actúen con rapidez y eficacia para resolver situaciones que afectan gravemente a los ciudadanos, particularmente cuando se trata de la salud y el bienestar de la infancia.